domingo, julio 01, 2007

Ubicáte nene

 

Dos días de paz y pensaba q ya tocaba el cielo con las manos. Me animé a bajar la dosis de corticoides. Grave error. Eran como las 5 de la mañana y un dolor ocular me despertó. ¿Sería pasajero? En absoluto. Nada de rinorea, ni cosas raras. Con los ojos cerrados me levanté, llegué a la cocina y saqué uno de los paquetes de hielo. Presionado sobre la sien y carótida derecha lo mantuve todo lo q pude, no se cuanto tiempo, pero el paquete se derritió y el dolor ni se enteró q tenía q desaparecer. No se cuanto tiempo tardó en desapareces la verdader crisis, pero como a la 1 y media de la tarde me tuve q levantar a tomar los remedios.
El peor error es tomar los corticoides y análgésicos con el estómago vacío. Tenía q comer algo, pero el dolor de la luz era insoportable. No dolía un solo ojo, sino los dos, y la frente. Esta es otra de las extrañezas q acompañan a mi querido Horton. Nunca deja de sorprenderme. Tiene esos condomentos extras para entretenerme y hacerme sentir como la mierda cada vez q viene de visita por mi casa.

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