Metamorfosis

Lo q iba a ser un viaje para descansar no lo fue. Asado, cartas, joda, asado, joda, futbol, no es ir a descansar. Estoy mas cansado q cuando partí para Vicuña Mackena.

Es un pueblo dedicado a las actividades agrícolas, por lo q mueve mucha plata, pero la misma no se ve reflejada en las casas sino en los autos. No quiero explayarme en detalles q si bien no son superfluos, no son tan importantes como lo q pasó el sábado en el boliche. El lugar se llama Jalisco. Llegamos como a las tres de la mañana luego de un copioso asado con ensalada (sin tomate) q preparó este servidor, regado abundantemente con un regio vino tinto q trajo uno de los amigos de mi amigo. Ya conocía el lugar asi es q no me resultaba extraño. El mismo tiene una serie de desniveles q favorecen la circulación de la gente y en la parte superior un vip medio choto al q sube cualquier infeliz q esté dispuesto a subir las escaleras. No me acuerdo q música pasaron asi es q quiere decir q o no era buena o estaba bastante borracho como para prestarle atención; solo recuerdo q un otario con un micrófono en la mano avivaba a la multitud y según el sorteaba tragos o algo así. Como a las cinco y media este otario dice al q pasaba la música a través de los parlantes: “Manuel (ponele q se llamaba Manuel) se está prendiendo fuego uno de los parlantes” mientras señalaba al parlante q se prendía fuego y colgaba a cuatro metros del suelo. La llama era del tamaño de un fósforo, apenas se veía. Todos nos quedamos mirándo y nos sonreiamos. Al lado mío estaba el Enano (un amigo) y le digo: “Ya está, ya se apagó, espero q no se les ocurra traer un matafuegos”. El Gonza (otro amigo) se aparece cantando: “Cro-ma-ñon, Cro- ma-ñón, se viene el Cro-ma-ñón”. Todos nos reíamos. Luego remato yo la situación al decir, mientras miro y señalo a un guaso q no había visto en mi vida: “Alguien debería decir: `Todos vamos a morir!`” Mas y mas risas. Nos quedamos mirando hacia el parlante y veo a un una especie de urso medio tarado corriendo con un matafuegos en la mano. En vano le grité: “No vayas a apretar eso!! Nos vas a matar a todos!

Los matafuegos q se usan en estos lugares son del tipo ABC, es decir de polvo químico, un polvo q se descompone en CO₂ desplazando al oxígeno necesario para la combustión, pero en contacto con las vías respiratorias produce una intensa comenzón y sensación de asfixia muy molesta, pero q de ningún modo te mataría. Pero lamentablemente eso es algo q no todos saben.

Este pelotudo accionó el matafuegos sobre las cabezas de todos. La reacción fue inmediata. Todos empezaron a correr hacia las escaleras, las cuales para colmo de males, tienen tres giros antes de llegar a la calle y se van haciendo mas angostas. “No nos vamos por las escaleras” le dije al Enano, “Quedémonos cerca de las ventanas q esto no pasa a mayores”. Al llegar a la cercanía de las ventanas encontramos a tres amigas, una de ellas muy mal por el polvo químico a las cuales acomodé por ahí para q no se metieran en el tumulto de la escalera. No me cansé ni me canso de putear al pelotudo del matafuegos. ¿Cómo puede ser q pongan a gente sin idea y mucho menos entrenamiento a cargo de algo serio como los matafuegos? Podría haber sido una tragedia. Si bien no hubieron heridos, mas q uno u otro con la nariz moqueando y los ojos irritados, pudimos haber muerto.

Al rato pusieron de nuevo la música, pero ya no era lo mismo. La mitad de la gente se había ido incluida la única mina q me había dado bola esa noche. Nos quedamos como hasta las seis y media.

Al otro día escucho esta conversación: “Supiste q Jalisco se prendió fuego anoche? Un quilombo. Después siguió. Adentro solo quedaron los borrachos” Con el Gonza nos reimos.